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domingo, 14 de febrero de 2021

Felíz día a los NO enamorados

 





Feliz día a los NO enamorados

 

En este mundanal mundo mundano,

al amor se le humilla con un precio fulano,

a tu amada conquistarás con un regalo fulgente,

mas no es amor verdadero sin vaciar tu cuenta corriente.

 

Sociedades arquetípicas de vigas de mantequilla,

el bolsillo es quien las impera y trilla,

endebles castillos de valores humanos,

robustos cimientos de sentimientos vanos.

 

Se le rememora en un día señalado,

necesario amasarlo a diario para un amor amelado.

Invocan a san Valentín para comprar santos regalos,

¡Corazones platónicos Kínder! Tal vez toquen varapalos.

 

Solteros, separadas, viudas, divorciados,

no somos bichos raros baldados,

tan sólo prolongamos en solitario la espera,

de un ladrón que nos robe el corazón, el alma y no la cartera.

 

Príncipes, princesas, largos años que se esfumaron,

con ellos la sensualidad y el arte de persuadir evaporaron,

mas hoy las pasiones son escabrosa realidad,

mariposas sin alas en el estómago exaltan vacuidad.

 

Ser amigo de uno mismo trajín dificultoso,

ver el otro lado del espejo, un aguijón venenoso,

sus reflejos dinamitan tu caja de pandora,

miedos rellenos de demonios la mayoría demora.

 

El sexo es excitante, saludable mas no imprescindible,

si no es correspondido, mero placer efímero y falible.

Del polvo venimos, vamos y acabaremos de forma pesarosa,

¡Cuidado! No caigas en brazos de una amantis religiosa.

 

Las espadas en alto tras la caza del amor,

creemos en la pasión, afecto y cariño con clamor,

fieles a nuestros principios e instinto aguzado,

el estandarte firme: qué más vale estar solo que mal acompañado.

 

 

José Ángel Castro Nogales

14/02/2021


jueves, 11 de febrero de 2021

Poema a Raquel Núñez Ríos (amante de la montaña)





 

A la amiga Raquel


Con ese lozano andar,

recorre ella con júbilo la montaña,

sembrando sonrisas para engrandar,

fulgurantes prados color verdemontaña.

 

Como hierro que atrae al imán,

vendavales de regocijo la llevan a las alturas,

la mochila atiborrada de afán,

pasiones que no tienen remedios ni curas.

 

Irradia tanta felicidad,

que plantas y ramas giran a su paso,

brama a los cuatro vientos su amor incondicional,

la montaña se rinde a sus pies hasta el ocaso.

 

José Ángel Castro Nogales

09/02/2021